💭 DILEMA REAL: "¿Evaluar técnicamente cada cambio propuesto o ser flexibles y confiar en el criterio del proveedor?"
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La Evolución susurra:
"Cada cambio debe evaluarse técnicamente: impacto, costo real y beneficio. Así evitamos sorpresas al final."
Sus argumentos:
- Los cambios no controlados aumentan el costo final en 40-60%.
- Una evaluación técnica evita cambios innecesarios o contraproducentes.
- Documentar cambios protege de reclamos posteriores.
- Permite mantener el presupuesto y cronograma bajo control.
- Cada cambio debe justificar su valor para el negocio.
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La Estabilidad responde:
"Los cambios son normales en cualquier proyecto. Mejor ser flexibles y confiar en el criterio del proveedor."
Sus preocupaciones válidas:
- Los proyectos rígidos suelen fracasar por falta de adaptabilidad.
- El proveedor conoce mejor las limitaciones técnicas.
- Evaluar cada cambio ralentiza el proyecto innecesariamente.
- La confianza mutua es más importante que el control excesivo.
- Los cambios sobre la marcha pueden mejorar el resultado final.